El actor Norman Reedus ha sido un alumno desertor, un artista y una idea tardía de Hollywood. Ahora está finalmente en el blanco como el tío duro con ballesta en la sensacional serie The Walking Dead.
Antes de obtener el papel del cazador de zombies paleto en The Walking Dead, ser padre de un niño con la ex-modelo de Victoria Secret, Helena Christensen, hacer que el vigilantismo pareciese guay en Los Elegidos (I y II), o tener una figura de acción hecha a su imagen y semejanza (completa con un pocho), Norman Reedus pensó que tal vez sería un artista.
“Hice esto en una exposición donde cortaba un trozo de piedra e hice una vagina gigante con un clítoris”, dice sonriendo con picardía mientras bebe su enésimo capuccino en una cafetería de Little Italy cerca de su apartamento de Manhattan. “Vívía en el centro de Los Angeles antes de todo esto, trabajando en una tienda de motos llamada ‘Dr Carl’s Hog Hospital.’ Después de relacionarse con una multitud artística, él “soldaría o aplastaría juntos cajas torácicas de metal con huesos pélvicos y huesos de la mandíbula. Toda mi obra es así, grotesca, pero hermoso de alguna manera.”
Así que es lógico que Reedus, de 45 años, más tarde se encuentre rodando The Walking Dead como el descuidado y sin embargo adorado Daryl Dixon, matando a los no-muertos en la serie más grotesca y popular de AMC. De hecho, Dixon estaba destinado a ser un personaje bastante desagradable ya que en los primeros borradores del guión, estaba descrito como un racista drogadicto hasta que Reedus vio un modo de arreglarlo. “Estaba escrito muy ‘Que te jodan, que te jodan, que te jodan’, y dije ‘No quiero hacer eso, no quiero tomar drogas. Quiero haber crecido en ese ambiente y después sentirme avergonzado por ello”.
Esa confusión interna (y los bíceps desnudos de Reedus) han convertido a Daryl en el favorito de la serie y a Reedus en el tipo de actor cuyos fans tienen apodos tales como ReedusSluts yDixon’s Vixens. Le han enviado un implante mamario y ha firmado un montón de traseros. “He visto a Daryl tatuado tal vez en un millar de personas. Me han pedido que eche mi aliento en una botella y sellarlo. Han puesto mi nombre a bebés. Hubo una mujer que me pidió un autógrafo y se sacó un pollo de la camiseta. Quería que sostuviese su pollo” (Lo hizo).
Hoy, sin embargo, está encantadoramente despeinado y un poco agotado. “Me desperté a las 6:45, hice el desayuno – huevos, cereales, fruta, solo una mezcla heterogénea – desperté a mi hijo, organicé sus cosas, lo llevé a la escuela, volví, traté de organizar mi casa, FreshDirectllegó, comencé a responder o los emails e hice un montón de eso”, dice con ironía señalando su café.
Debido a que The Walking Dead se rueda en Georgia siete meses, el tiempo que Reeduspasa en Nueva York, lo gasta en el modo padre. “Es un chico genial”, dice de su hijo Mingus, de 14 años. “Ha empezado un grupo llamado God Fart. Tengo un vídeo de´el haciendo skate por las calles de Nueva York con un viejo vestido. ” Por supuesto, tener un padre que lucha contra zombies en televisión sin duda ayuda a ser guay. “Es divertido. Estaba mirando en su armario y le dije ‘¿De qué me puedo deshacer?’ ‘¿Qué es lo que ya no quieres llevar más?’, ríe Reedus. “Hizo una pila gigante con camisetas de Daryl Dixon.”
La propia infancia de Reedus fue una que él dice que le preparó bien para interpretar al forastero. Nació en Hollywood, Florida, pero sus padres se separaron cuando él era un niño y cuando estaba en la adolescencia, vivió en al menos una docena de ciudades ya que su madre saltaba de un trabajo a otro. “Ella era una conejita de Playboy, enseñaba en una guardería en Harlem, vendió ataúdes durante un tiempo – ella los llamaba ‘camas eternas’”. Con el tiempo, Reedus se acostumbró a esa vida itinerante. “Se hizo de la forma que era. Todos los pequeños y extraños mecanismos de defensas que pones como parte de ser el chico nuevo de la escuela, estar en una nueva zona, tener que mudarte constantemente… me ayudó a hacer lo que hago ahora de una forma extraña.”
Después de haber sido “en general, un estudiante de mierda” quien quedaba con los chicos a los que les gustaba el punk – rock, “casi” se graduó antes de abandonar los estudios para viajar. “Recuerdo decirle a uno de mis profesores ‘Me voy a Japón‘. Creo que fue en clase deGeometría y ella decía ‘Debes. Debes irte.’ Y Reedus lo hizo, yendo primero a Tokyo, luego aLondres (‘Acabé de ocupa en una casa con un montón de gente y trabajando en una tienda de tarjetas postales en Piccadilly y viviendo a base de patatas’) y después en España (‘Estaba viviendo cerca del océano en un pequeño apartamento de mierda donde el agua salada salía del grifo’) antes de seguir a una chica a Los Angeles y conseguir el trabajo en la tienda de motos.
La noche siguiente de ser despedido – “Me metí en una pelea con el dueño sobre un pitbull que estaba masticando una parte de un coche deportivo que estaba construyendo en el patio trasero” – se emborrachó tanto en una tienda en Hollywood Hills que su mal comportamiento llamó la atención de algunas personas de la industria. “Lleva las grandes y rotas gafas de un amigo e iba pasado. Era una producción”, dice. Cuando le preguntaron si quería estar en una obra de teatro, su primera pregunta fue “¿Vale la pena?”.
Él ya ha aparecido en más de 30 películas y una gran cantidad de vídeos musicales, incluídosRadiohead, Björk y Lady Gaga. “La gente de Gaga me preguntaron si podía montar en moto y les dije ‘Um, ahora mismo estoy encima de una moto.’” Ha modelado para Prada, Levi y Lexusa pesar de su afirmación de que “probablemente no sea el mejor modelo, soy bajito, mido 1,78 cm, bebo cerveza y no puedo permanecer sentado mucho tiempo.”
Y a través de todo esto, ha seguido haciendo arte, recientemente dirigiendo tres cortometrajes muy oscuros – “Mi madre los vio, me miro después y dijo “Acabas de arruinar la Navidad” – y publicado un libro de fotografías titulado ‘The Sun’s Coming Up…Like a Big Bald Head’ que diceq que es “literalmente un anuario de mis últimos quince años de vida.” Hay fotos adorables de Mingus intercalado con gemas visuales tales como atropellos que él veía en las carreteras secundarias de Georgia cuando conducía su moto de camino al trabajo. “Le enviaba mensajes al reparto ‘Hey, cuando vayas conduciendo al set y veas un atropello, ¿puedes recordar más o menos donde es?’ Tenía a todo el reparto en busca de atropellos de animales” sonríe Reedus ante la idea. “Encontraron algunas cosas muy buenas.”
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